Todas las fantasías románticas sobre Argentina se concentran en Las Pampas, lo que le permite echar un vistazo a la historia reciente de Argentina. Hoy, en sus caminos internos y en las tradicionales estancias, el “Gaucho” continúa la tradición y el espíritu de este infame personaje nómada. Estos reductos son ideales para relajarse y salir del ajetreo de la ciudad durante unos días antes de volar a casa.
La Pampa real se asemeja a una tierra de fantasías. La tierra fértil y los ricos pastos, su vasta pradera se pierde de vista salpicada de miles de cabezas de ganado que son la base del "asado" de las mejores carnes del mundo.
Entrar por los caminos escondidos en la inmensidad de La Pampa equivale a recorrer la misma geografía que alguna vez perteneció exclusivamente a los gauchos.
Hoy todavía es común ver a esos hombres míticos que hasta hace poco vagaban por la llanura sin patrón, sin dueño y sin ley.